Le pidió a Joaquín una dirección de centro comercial por allí
cerca. Llegaron bastante pronto y entraron en Zara, había unos
vestidos increíbles, Laura se compró un vestido blanco de encaje de
tirantas gordas y cuello marinero, Cristina una falda de flores y una
camiseta blanca lisa, Lucía unos tacones estampados de una cuña
bastante grande y Ester un pantalón corto con la bandera de
Inglaterra y una camiseta azul marino.
Después fueron a Blanco y Laura se compró unos tacones
impresionantes, marrones del color del cinturón del vestido y Lucía
una mono de flores con un fondo verde.
Después de un buen rato de compras Laura invitó a sus amigas a un
helado y ella, mientras se comían el helado fue a Stradivarius y
compró una pulsera a cada una, todas iguales y otra más para ella.
Tuvo mucha suerte ya que encontró pulseras que tenían colgado un
Sugu cada una. Eran las perfectas. Una blanca para Cristina, Sugus de
melón. Una blanca amarillenta para Lucía, Sugus de piña. Una verde
para Ester, Sugus de manzana. Y otra para ella, amarilla, la Sugus de
limón.
Se metió las pulseras en el bolso y regresó a la heladería.
-¿Dónde estabas?-preguntó Cristina.
-He ido a buscar un detalle para Joaquín-mintió la chica-pero no he
encontrado nada.
-Ahora te ayudamos a buscar algo no te preocupes-dijo Ester.
-Gracias.-contestó Laura.
Entre todas encontraron una pulsera de plata con la fecha del día
que empezaron a salir y sus iniciales. 28'06'12 J&L.
-Chicas, vamos a volver a casa que nos queda todavía media
hora de camino y son las 9:30-dijo Lucía.
-Tienes mucha razón Lucía, volvamos ya a casa-contestó Cristina.
En el metro Laura le envió un Whatsapp a Joaquín:
Hey! Ya te echo de menos guapo, te tengo una cosita, espero que
te guste, te lo doy el viernes ¿vale? Un beso bonito.
Joaquín contestó bastante rápido:
Hola princesa, yo también te echo muchísimo de menos. No
tenías que comprarme nada, ok nos vemos el viernes. Otro beso para ti.
Sus amigas le quitaron el móvil, y leyeron el mensaje.
-Ohh, que bonito. Muack, muack, muack, muack-dijo Lucía.
Rieron todas a la vez. El metro de paró y bajaron del tren. Subieron
las escaleras y llegaron a su piso. Prepararon la cena entre todas,
cenaron vieron la tele y se acostaron, mañana seria un día largo.
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